EL DESTINO DE LOS APÓSTOLES: Parte 4. El Apóstol Pedro.
Pedro es sin duda alguna el apóstol que con más frecuencia se menciona. Incluso más que Pablo. Pedro perteneció al círculo más íntimo de los seguidores de Jesús y ciertamente fue líder entre ellos. Frecuentemente es el portavoz de los doce y en los tres evangelios sinópticos se nos dice que sólo el confiesa a Jesús como “El Cristo” (Marcos 8:29; Mateo 16:16; Lucas 9:20).
Aunque Pedro negó a Jesús tres veces, su fe fue renovada después de la resurrección. En Hechos 4 se nos dice que, al enfrentar amenazas de las autoridades Judías para dejar de proclamar el “nombre de Jesús”, Juan y Pedro exclamaron:
“Juzgad si es justo delante de Dios obedecer a vosotros antes que a Dios; porque no podemos dejar de decir lo que hemos visto y oído”.
La primera pregunta a responder es: ¿Estuvo realmente Pedro en Roma después de la crucifixión?
1 Pedro 5:13 es la evidencia indirecta más antigua que tenemos de la presencia de Pedro en Roma:
“La que está en Babilonia, elegida juntamente con vosotros, os saluda, y también mi hijo Marcos”
Según el erudito Richard Bauckham, la mayoría de los estudiosos modernos reconocen que “Babilonia” se refiere al lugar de dónde se escribe 1 de Pedro. “La que está en Babilonia” se refiere a una iglesia. La cuidad de Babilonia, para aquél entonces yacía en ruinas así que es poco probable que se refiriera a tal lugar. “Babilonia” era un nombre críptico relativamente común para referirse a Roma.
Una segunda línea de evidencia yace en la alta posibilidad de que Marcos haya sido escrito basado en testimonio de Pedro desde Roma. Papías registra que Marcos fue el intérprete de Pedro y que escribió cuidadosamente todo lo que Pedro recordó de sus experiencias con Jesús. Ireneo, quién posiblemente escribe desde los archivos de Roma, afirmó lo mismo. El único que difiere en cuanto a geografía entre los Padres apostólicos fue Juan Crisóstomo (d. AD 407), quién creía que Marcos registró el recuento de Pedro cuando éste último se encontraba en Egipto. Por otra parte, la evidencia interna también indica que Marcos tiene su origen en Roma.
El austero comentario de Pablo en 2 Timoteo 4:11, “Toma a Marcos y tráelo contigo” así como 1 Pedro 5:13, en donde Marcos envía su saludo, sitúan a Marcos en Roma, muy probablemente con Pedro. Esto, aunque no sea necesariamente indiscutible, constituye evidencia importante de que Pedro, de hecho, estuvo en Roma.
Para un argumento completo con el resto del minucioso análisis ver McDowell, The Fate of the Apostles.
La segunda pregunta a responder es: ¿Murió Pedro Martirizado?
La tradición mantiene que Pedro murió en Roma durante el reinado de Nerón en AD 64-67. Una minoría de eruditos dudan de esta perspectiva. Hay un sinnúmero de fuentes acerca del paradero de Pedro en los primeros dos siglos, así que este estudio se basa en la evidencia más cercana a los hechos.
La primera referencia del martirio de Pedro se encuentra en Juan de la boca del mismísimo Jesús:
Juan 21:18-19
En verdad, en verdad te digo: cuando eras más joven te vestías y andabas por donde querías; pero cuando seas viejo extenderás las manos y otro te vestirá, y te llevará adonde no quieras. Esto dijo, dando a entender la clase de muerte con que Pedro glorificaría a Dios. Y habiendo dicho esto, le dijo*: Sígueme.
La naturaleza críptica de este dicho confiere autenticidad a que la fuente sea Jesús mismo. Más aún, no tenemos manuscritos antiguos que carezcan de este pasaje por lo que no es una interpolación.
La referencia de “extender las manos” se conocía en la antigüedad como una referencia a la crucificción. Dado que este argumento es complejo y tomaría bastante tinta, refiero al amable lector al libro de McDowell para mayores detalles.
Un segundo pasaje que presagia la muerte de Pedro es Segunda de Pedro 1:12-15
Por tanto, siempre estaré listo para recordaros estas cosas, aunque vosotros ya las sabéis y habéis sido confirmados en la verdad que está presente en vosotros. Y considero justo, mientras esté en este cuerpo [tienda], estimularos recordándoos estas cosas, sabiendo que mi separación del cuerpo terrenal es inminente, tal como me lo ha declarado nuestro Señor Jesucristo.
La “tienda” se refiere aquí al cuerpo como algo temporal—en espera de algo duradero y permanente—e indica que el tiempo de vida en la tierra de Pedro se acortaba. Esto constituye evidencia temprana de que la iglesia creía que Pedro moriría pronto. Esto independientemente de la autoría de 2 de Pedro.
Otras fuentes que McDowell menciona con lujo de detalle pero que no discutiremos para ser breves incluyen 1 Clemente 5:1-4, Carta de Ignacio a los Romanos 4:3, Carta de Ignacio a Esmirna 3:1-2, El Apocalipsis de Pedro, La Ascensión de Isaías, Los Hechos de Pedro, El Apócrifo de Santiago, Dionisio de Corinto, Ireneo, y Tertuliano.
CONCLUSIÓN
Según el detallado análisis—que aquí nos hemos limitado a sintetizar—McDowell concluye lo siguiente de acuerdo a esta escala:
- Pedro Murió como Mártir—Hecho Histórico con Certeza casi Absoluta (9-10).
- La Crucifixión de Pedro—Hecho histórico con Alta Certeza (8).
- Pedro estuvo en Roma—Hecho histórico con Alta Certeza (8).
- Pedro Murió como Mártir durante el reinado de Nerón—Muy Probable (7).
Al considerar la evidencia más sólida, la perspectiva tradicional de que Pedro fue crucificado durante el reinado de Nerón se mantiene sobe un fundamento histórico muy sólido.
¿Pero qué con la idea de que fue crucificado de Cabeza para no ser crucificado igual que el Señor Jesús?
Ese será el tema a cubrir en nuestro próximo escrito. Parte 5: ¿Fue Pedro Crucificado de Cabeza?
Me gusto el articulo
Me Alegro Jose!
Muy bueno. ¿Podrias incluir las citas de los padres apostolicos que mencionas? ¿o alguna fuente para acceder a ellas?
Hola Franco,
En realidad son bastantes fuentes y citas. Todas están en el libro de Sean. En realidad me tomaría casi transcribir el libro para hacer justicia a las citas y el argumento.
Si hay algo en particular con gusto lo puedo poner por acá.
Un saludo!!
CD